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Un cargador GaN utiliza nitruro de galio en lugar del silicio tradicional, lo que permite un tamaño más pequeño y una mayor eficiencia. En comparación con un cargador USB estándar, un cargador GaN USB-C puede ofrecer más potencia (como 65 W o 100 W) en un formato compacto, ideal para la carga rápida de portátiles, tabletas y teléfonos.
El mejor cargador USB-C depende de tus necesidades de energía. Para smartphones, 30 W suelen ser suficientes, pero las laptops suelen necesitar un cargador USB-C de 65 W o incluso 140 W para modelos de alto rendimiento. Asegúrate de que el cargador sea compatible con Power Delivery (PD) y con el rango de voltaje de tu dispositivo.
Aunque generalmente es seguro dejar un cargador GaN o USB-C enchufado, especialmente si cuenta con protección contra sobretensión, sobrecalentamiento y sobrecargas, no siempre se recomienda. Con el tiempo, mantener un cargador USB enchufado constantemente puede aumentar ligeramente el consumo de energía y exponer el dispositivo al polvo o a sobrecargas eléctricas. Desenchufarlo cuando no se usa puede prolongar la vida útil tanto del cargador como del enchufe.
No. Los cargadores USB modernos, especialmente los de GaN, utilizan una gestión inteligente de la energía para suministrar solo la energía que tu dispositivo necesita. Un cargador USB-C de 100 W puede cargar de forma segura tanto portátiles como dispositivos de bajo consumo, como teléfonos, sin sobrecargarlos, siempre que esté certificado y sea compatible con Power Delivery (PD).